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Olimpiadas 2012 según Danny Boyle

por Mariana Dávila Moreno

Tras cuatro años de espera, este viernes 27 de julio a las tres de la tarde (hora México) dará inicio el evento deportivo por excelencia: los Juegos Olímpicos. Éstos se llevaran a cabo en Londres y su ceremonia de inauguración y clausura (12 de agosto) correrá a cargo de Danny Boyle (Slumdog Millionare, 2008), director inglés nacido en Manchester que desde 1994 con su filme Tumba al ras de la tierra, nos ha dado muestras de su enorme talento. Con 27 millones de libras de presupuesto y 10, 000 voluntarios asistiéndole, el ganador del Oscar se enfrenta, hasta ahora, al reto más gran de su carrera.

Ya en el 2008 en Beijing fuimos testigos de los extraordinarios resultados que pueden ser alcanzados por un director de cine que salta del celuloide a la escena del espectáculo deportivo, cuando Zhang Yimou (Red Sorghum, 1987 y La maldición de la flor dorada, 2006) nos entregó un espectáculo alucinante y, al igual que su filmografía, lleno de color. Que, aunque contrastaba con la crudeza de esa China adversa de sus cintas, buscaba también demostrar un país que sentía la necesidad de ser mejor.

¿Qué se espera, entonces, de un creador de mundos delirantes (28 Days Later, 2002) y atractivos efectos visuales (127 horas, 2010) como lo es Boyle? Primero que nada, y porque la naturaleza del evento lo exige, patriotismo. Isles of Wonder, título del espectáculo que se deriva de La Tempestad de Shakespeare, obra en la que se inspira el espectáculo entero, busca concientizar a la audiencia del esplendor atemporal del Reino Unido. Asimismo, es un discurso de paz y conciliación.


La recreación de la campiña inglesa (que incluye la colina Glastonbury Tor, un equipo de cricket, lluvia condensada en nubes “realesâ€, granjeros y a 12 caballos, 10 gallinas, 70 ovejas, entre otros animales), la utilización de una campana armónica de 23 toneladas (la más grande del mundo) y una banda sonora -a cargo del duo Underworld (Trainspotting, 1996 y La playa, 2000)- que incluye temas de los Beatles, Adele, y los míticos Sex Pistols, así como las rumoradas presentaciones en vivo de Sir Paul McCartney, The Who y Take That son algunas de las sorpresas esperadas. Elementos que cumplen a la perfección con el objetivo de Boyle de demostrar que Inglaterra es, en efecto, un oasis de riqueza natural y cultura.

La duración estimada del evento es de tres horas, mismas en las que aparte de lo ya mencionado anteriormente, se contará con: cuatro palos de mayo representando las naciones que conforman al Reino Unido, dos muchedumbres integradas por 100 personas cada una en los extremos del estadio, una “hora de cultura†en la cual los atletas desfilaran por el campo y, finalmente para el cierre, una función de fuegos artificiales. Danny Boyle asegura que todo esto, sumado a los dos cortometrajes que la BBC aportará para el espectáculo, harán que ésta inauguración sea más cinematográfica que todas las anteriores: “Estamos tratando de crear en los espectadores la sensación de que lo que están contemplando es el rodaje de un filme, de una gran secuencia que merece ser admiradaâ€. En otras palabras, se estará empujando la realidad a sus límites, adornándola con quimeras visuales al más puro estilo hollywoodense.


Si bien la utilización de animales y utilería biodegradable suponen un reto para el inglés, su mayor desafío se encuentra más bien en el tono del espectáculo. El cual no ofrece únicamente escenas visuales sublimes, sino que también pretende narrar una historia. El proyecto es, sin duda, ambicioso y original, por ello esperemos que éste se convierta en un clásico inolvidable del calibre de Trainspotting y no en un intento fallido como La playa.
25.07.2012

Mariana Dávila Moreno


@manzanita_zeta
Biodegradable, comunicóloga, cafeinómana, escritora, periodista en formación. Amante de las bellas artes, las tardes lluviosas y las enfrijoladas sin pollo. En búsqueda de realidades inusitadas.....ver perfil
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